Un mes más llega a su fin… el tiempo pasa de prisa pero nos deja un reto más del Juego de Blogueros 2.0, un juego que me encanta, porque siempre termino descubriendo recetas completamente nuevas para mí, con ingredientes que en el día a día no me plantearía utilizar. Este mes de junio hemos utilizado la remolacha, y aunque no es un ingrediente exótico, pues no es un ingrediente que en cuanto lo veo piense…me lo llevo porque voy a preparar un postre o un plato… que lo compro para ocasiones puntuales vamos, pero que muy puntuales (quizás la rara sea yo!) pero la remolacha no entra en mi lista semanal de la compra….

Así que cuando por mayoría mis compañeros del juego decidieron que el ingrediente del mes sería la remolacha… sentí un cierto punto de preocupación… porque… ¿qué hago yo con unas remolachas? fue lo primero que pensé… Pero ahora después de haber descubierto toooodo lo que se puede hacer con remolachas… creo que se ha ganado un lugar en mi lista semanal de la compra 🙂 No sólo por lo buena que está, sino, por lo nutritiva y sana que es, y la diversidad de recetas que se pueden preparar con «unas simples remolachas».

En este mes, he aprendido a jugar con las texturas, a utilizar mi horno para algo más que hornear un bizcocho… en fin, que me he puesto las botas… seguidme porque os va a encantar!!!

Ingredientes Para el Bizcocho

250 gramos de mantequilla
250 gramos de azúcar moreno
3 huevos XL
100 gramos de chocolate de cobertura
350 gramos de remolacha cocida (reservar el jugo)
1 cucharada de esencia de vainilla
300 gramos de harina
15 gramos de levadura
1 pizca de sal

Ingredientes para la Cobertura

200 ml. de nata para montar (33% materia grasa)
100 gramos de queso Philadelphia
25 gramos de mantequilla sin sal
75 gramos de azúcar glas
jugo de la remolacha

Para decorar

remolacha deshidratada, chocolate o semillas de amapola

Procedimiento

La elaboración de este bizcocho es bastante sencilla, lo primero que haremos será poner a cocer las remolachas, en un cazo con agua (también se puede utilizar la que venden empaquetada al vacío pero nada mejor que saber de donde vienen los productos que consumimos, no os parece?,… yo he utilizado remolachas frescas). Una vez cocidas (como las patatas) retiramos el agua y dejamos enfriar para luego triturar con nuestro túrmix. El siguiente paso será escurrir la remolacha para eliminar el exceso de agua y evitar de esta forma que el bizcocho nos quede pesado. El agua que la remolacha suelte, nosotros la reservaremos, porque luego la utilizaremos en nuestra cobertura.

Precalentar el horno a 180º C. Engrasar un molde redondo de 25 centímetros, cubriremos la base del molde con papel de horno y reservamos.

Tamizar la harina, junto con la levadura y la sal. Reservamos.

En un cazo a baño maría procedemos a derretir el chocolate de cobertura junto con 50 gramos de mantequilla. Reservamos hasta que esté templado.

En el bol de la batidora comenzamos a batir el resto de la mantequilla junto con el azúcar hasta que la mezcla esté esponjosa; añadiremos los huevos uno a uno, previamente batidos y teniendo cuidado de no añadir el siguiente hasta que el anterior no se haya incorporado completamente a la mezcla. Añadimos la vainilla y seguidamente los 350 gramos de puré de remolacha junto con el chocolate; batimos bien y finalmente agregamos la harina que tenemos reservada, batiendo solamente lo necesario para incorporar a la mezcla.

Colocamos nuestra masa en el molde que tenemos reservado y metemos al horno durante aproximadamente 40-45 minutos o hasta que al pinchar en el centro con un palillo éste salga completamente limpio. Sacamos del horno y dejamos enfriar durante 10 minutos en el molde sobre una rejilla. Pasados estos 10 minutos desmoldamos y dejamos enfriar completamente.

Como siempre digo, me gusta preparar los bizcochos de un día para otro, esto permite que la miga se asiente correctamente, lo mismo que los sabores, por tanto, una vez que el bizcocho esté completamente frío lo envolvemos en papel film y lo reservamos.

La Cobertura

Os recuerdo que para montar la nata, el bol de nuestra batidora, con el batidor de alambre, y la nata deben de estar fríos, ya que si la nata está a temperatura ambiente no montaremos nada, por el contrario se nos cortará… Así que comenzaremos por batir la nata junto con el azúcar glas (previamente tamizado) sin llegar a montar del todo. Reservamos.

En otro bol mezclaremos el queso junto con la mantequilla hasta obtener una mezcla homogénea, incorporaremos la nata con ayuda de una espátula y el jugo de la remolacha removiendo hasta que el color sea uniforme y el tono que nos guste. Tened cuidado de no poner mucho jugo porque entonces la mezcla se cortaría… Reservamos en la nevera

Remolachas deshidratadas

No tenéis idea de cuanto se puede llegar a leer sobre un mismo tema cuando algo se te mete entre ceja y ceja… al final comprendí que tenia 3 opciones pero la primera no era deshidratar sino freír la remolacha, por tanto ésa estaba descartada desde el minuto uno. La siguiente opción era comprar la máquina para deshidratar alimentos… pero el cacharro es bastante grande y sinceramente tampoco le voy a dar el uso… aunque después de probar mis chips de remolacha me lo estoy pensando mejor… igual si que se le puede sacar mucho partido… Pero de momento mis chips los hice en el horno con 8 horas de cocción a 60º C… Si, 8 horas, en las que pensé de todo… valdrá la pena?, quedarán bien? y si al final no me sirven?… y si apago el horno y mejor los frío en aceite caliente?… ¿aceite en el queso?…y mil dudas existenciales más… al final ganó el sentido común ¿o no? pero yo obtuve unas deliciosas remolachas deshidratadas… y ésta es mi respuesta al chef de un hotel donde estuve trabajando el verano pasado que me dijo que no lo lograría en la vida… (hacer chips de remolacha deshidratadas). SI, LO HE HECHO, LO HE CONSEGUIDO. Ahora ya estoy más tranquila… 😉

Días después de haber hecho esta receta, descubrí que en Santiveri venden chips de remolacha, en realidad venden en varios sitios, pero siempre salados… así que mi esfuerzo ha merecido la pena… (menos mal).

No hay ninguna técnica para deshidratar la remolacha, simplemente pelar y cortarla lo más fino posible, ponerla sobre papel de cocina para eliminar el exceso de agua que sueltan…

Y luego en la bandeja del horno, que habremos cubierto previamente con papel de horno. Y luego metemos al horno y las dejamos allí durante unas 8 horas hasta que están crujientes, yo les daba vuelta cada dos horas más o menos y listas para consumir, con estos chips he decorado mi tarta de remolacha… el resto nos los comimos viendo una peli en casa… (mejor opción que las palomitas de maíz!)

Montaje de Tarta

Colocamos el bizcocho en el plato en el que vamos a servir, cubrimos con la crema que tenemos reservada en la nevera y decoramos con virutas o flores de chocolate (ahora en verano es bastante complicado trabajar el chocolate), por lo que una alternativa podrían ser las semillas de amapola y los chips de remolacha, flores comestibles,… podéis decorar usando vuestra imaginación ya que el color de la crema es precioso y seguro os inspira, yo sólo puedo deciros que es una tarta deliciosa y que seguro que repetiremos muchas veces… espero que os guste!

Me muero de ganas por ver lo que han preparado mis compañeros, si queréis acompañarme en mi ruta por sus blogs os invito, los participantes de este mes son: